La Semana Santa es la semana más importante del año porque nos recuerda y conmemora la Pasión,  Muerte y Resurrección de nuestro Señor Jesucristo.

Esta semana inicia con el Domingo de Ramos, recordando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, y termina con el Domingo de Resurrección, recordando y celebrando que Cristo ha vencido a la muerte.

La Semana Santa debería ser muy importante para todos, pero desgraciadamente, para muchos, es solo ocasión para descansar, comer y vacacionar.

Pero para nosotros los Católicos esta es una semana intensa de oración y reflexión, y algunos consejos que pueden ayudarnos a vivir mejor esta Semana Santa, son los siguientes:

1- Acompaña a Jesús en la Oración:

A través de la oración y de la reflexión de su misterio, podemos acercarnos a Jesús. Y si en esta semana meditamos detenidamente la pasión de Jesús, podremos comprender y amar el misterio de amor por el cual Cristo se ha entregado por Nosotros.

Además la oración del Rosario, contemplando los misterios dolorosos, puede ser una forma poderosa de conectar con la pasión de Cristo.

2- Asiste a las Celebraciones de Semana Santa:

Este tiempo no es para divagar o para vivirlo de una manera aislada, sino para vivirlo en comunidad, para vivirlo en la iglesia.

3- Dedica un tiempo para las Obras de Misericordia:

Si nosotros meditamos en este tiempo la pasión de nuestro Señor Jesucristo, y en ella reconocemos la entrega tan grande de amor que lo llevo hasta a morir en la cruz por nosotros, esto debe sensibilizarnos y llevarnos a querer ayudar a nuestros hermanos los mas necesitados.

4- Realiza una Sincera Confesión:

Todos necesitamos una buena confesión que nos ponga al día, que nos haga morir con Cristo, morir a nuestros pecados y que nos haga vivir mas plenamente también la Resurrección.

No podemos pretender celebrar la Semana Santa únicamente de manera externa, sino que debemos animarnos a encontrarnos con el amor de Dios en nuestro Corazón, permitir que su reconciliación, su amor, su perdón sanen nuestras heridas y nos comprometan en nuestra vida.

Y así nosotros estaremos aceptando la salvación que El nos ofrece. Porque cuando acudimos a la gracia en los sacramentos, estamos aceptando su salvación.

5- Vive con Intensidad el Triduo Pascual:

El Jueves Santo por la tarde, se celebra la liturgia de la Cena del Señor, en ese momento entramos en el Triduo Pascual. Y el Triduo Pascual, por supuesto, tiene penitencia, tiene el ayuno y la abstinencia del Viernes Santo.

Dejémonos llevar por la dinámica de la liturgia a los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de nuestro Señor Jesucristo.

Vive el Jueves Santo como una ocasión para recordar y celebrar el amor de Cristo que se derrama sobre nosotros a través de la Eucaristía.

Medita en la Pasión y Muerte de Jesús el Viernes Santo, participando en la liturgia de la Pasión del Señor.

Y experimenta la alegría de la Resurrección en la Vigilia Pascual del Sábado Santo, renovando tu fe en el triunfo de la vida sobre la muerte.